El ministro del Interior, Juan José Santiváñez, señaló que las investigaciones en torno al asesinato de la joven Sheyla Cóndor seguirán su curso, a pesar del hallazgo sin vida este mediodía del suboficial Darwin Condori, el principal sospechoso, pues el objetivo es dar con todos los responsables de este caso.
“La investigación exhaustiva ya empezó y no vamos a parar hasta llegar hasta las últimas consecuencias, porque aquí generadores del daño no solamente es este sujeto que ya ha dejado de existir, sino también el personal policial que permitió su permanencia en la institución policial”, afirmó, en declaraciones a TV Perú.
Asimismo, señaló que ha dado instrucciones para que en el funeral del referido suboficial no se le rinda ningún tipo de honor correspondiente a su condición policial, pero, además, está prohibido la asistencia de sus compañeros de armas.
“La instrucción que he dado inmediatamente es que, a este sujeto (sea enterrado) sin
ningún honor, están prohibidos los efectivos policiales de apersonarse al velorio, al que tiene derecho la familia, pero sin ningún honor. Efectivo policial que se apersone en este caso al velatorio, inmediatamente será sometido a un proceso disciplinario”.
Sobre las dudas que han expresado algunos familiares de la víctima, sobre la posibilidad de que el cuerpo encontrado este mediodía en un hotel de San Juan de Lurigancho no sea del sospechoso, el ministro respondió que están en todo su derecho de corroborar la identidad del suboficial.
“Nos pondremos a disposición para cualquier caso de investigación en la que deseen participar”.