- Respeta las normas de tránsito. Sin importar si eres peatón, ciclista o conductor de un vehículo, recuerda que las señales y semáforos están diseñados para protegernos.
- Presta atención en todo momento. Evita distracciones como el uso del celular, audífonos o cualquier dispositivo que pueda desviar tu atención del entorno.
- Evita conductas de riesgo. Conducir bajo los efectos del alcohol o sustancias alucinógenas, exceder los límites de velocidad y realizar maniobras imprudentes son las principales causas de siniestros.
- Evita distracciones al volante. El uso del celular, comer manejando o cualquier otra actividad que desvíe tu atención puede ser fatal.
- Revisa regularmente el estado de tu vehículo o bicicleta. Asegúrate de que los frenos, luces, neumáticos y otros sistemas estén en óptimas condiciones.
- Usa el equipo adecuado. Tanto conductores de vehículos automotores, como ciclistas y peatones deben contar con implementos que permitan a otros advertir su presencia en las pistas. Además, deben usar cinturones de seguridad o casco, según se requiera.
- Promueve la educación vial: Participa en campañas y actividades que fomenten una cultura vial, la cual es clave para generar conciencia colectiva.